Sono la bocina y alrededor de 6000 personas comenzaron a escribir su historia sobre el asfalto, era hora de despedirse del equipo logístico con el que luego nos veríamos mas adelante en el trayecto. Había planificado según la respuesta del cuerpo avanzar los primeros kilómetros junto al profe, aunque las expectativas de cada uno variaban en mis planes estaba el de llegar antes de las 2 horas. Ajustamos el cronometro y nos olvidamos del mundo...
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